C'era una volta Sergio Leone

Érase una vez Sergio Leone: este es el evocador título de la gran exposición en el Ara Pacis con la que Roma celebra, 30 años después de su muerte y 90 años después de su nacimiento, uno de los mitos absolutos del cine italiano.

Promovida por el Assessorato alla Crescita culturale di Roma Capitale – Sovrintendenza Capitolina ai Beni Culturali, la exposición llega a Italia tras el éxito del año pasado en la Cinémathèque Française  de París, institución que coprodujo la muestra romana junto con la Fondazione Cineteca di Bologna.

La exposición se realiza con la contribución de Ministero per i Beni e le Attività Culturali e per il Turismo, en colaboración con el Istituto Luce - Cinecittà, Ministère de la culture (Francia), CNC – Centre national du cinéma et de l’image animée, SIAE y gracias a Rai Teche, Leone Film Group, Unidis Jolly Film, Unione Sanitaria Internazionale, Romana Gruppi Elettrogeni Cinematografici. Digital Imaging Partner: Canon. Sponsor técnicos: Italiana Assicurazioni, Hotel Eden Roma, Bonaveri. El diseño es de Equa di Camilla Morabito y el apoyo organizativo de Zètema Progetto cultura.

La exposición - comisariada por el director de la Cineteca di Bologna, Gian Luca Farinelli, en colaboración con Rosaria Gioia y Antonio Bigini - cuenta la historia de un universo sin límites, el de Sergio Leone, arraigado en su propia tradición familiar: su padre, director en la edad de oro del cine mudo italiano, elegirá el seudónimo Roberto Roberti, y Sergio le guiñará un ojo firmando Per un pugno di dollari con el seudónimo anglosajón Bob Robertson

En su intenso viaje artístico, Sergio Leone cruza el peplum, (un género cinematográfico histórico-mitológico), reescribe literalmente el western y encuentra su clímax en el proyecto de su vida: C’era una volta in America. A esto le seguiría otra película de proporciones grandiosas, dedicada a la batalla de Leningrado, de la que sólo quedan, por desgracia, unas pocas páginas escritas antes de su muerte. A Leone, de hecho, no le gustaba escribir. Más bien, era un narrador oral que desarrollaba sus películas contándoselas a sus amigos, guionistas, productores, sin parar, casi como los antiguos cantantes que crearon la epopeya homérica. Pero sin embargo, su legado es enorme, un legado creativo cuyo alcance sólo ahora comienza a ser comprendido. Sus películas son, de hecho, "la Biblia" en la que los estudiantes de cine de todo el mundo aprenden el lenguaje del cine, mientras que muchos cineastas contemporáneos, desde Martin Scorsese a Steven Spielberg, desde Francis Ford Coppola a Quentin Tarantino, desde George Lucas a John Woo, desde Clint Eastwood a Ang Lee siguen reconociendo su deuda con su cine.

Las raíces del cine de Sergio Leone están, por supuesto, también arraigadas en su amor por los clásicos del pasado - se exhiben las películas de los gigantes del oeste, desde John Ford hasta Anthony Mann - y revelan el gusto por la arquitectura y el arte figurativo que encontramos en la construcción de los decorados y planos, desde los largos campos de paisajes metafísicos sugeridos por De Chirico, hasta la  cita explícita de la obra  Love  de Robert Indiana, un símbolo extraordinario, en C’era una volta in America, de un  inequívoco salto a una nueva era. Para Leone, el cuento de hadas es el cine. Sin embargo, el deseo de contar los mitos (Occidente, la Revolución, América) utilizando la memoria del cine y la libertad de los cuentos de hadas, siempre entra en conflicto con su cultura como un italiano que conoció la guerra y pasó por la temporada neorrealista. Per qualche dollaro in più  Leone puede permitirse el lujo de satisfacer su fascinación por el pasado y su obsesión documental con el mito, cuidando cada detalle. Porque un cuento de hadas cinematográfico, para funcionar, debe convencer a los espectadores de que lo que ven está sucediendo realmente.

Gracias al precioso material de archivo de la familia Leone y de Unidis Jolly Film, el visitante entrará en el estudio de Sergio, donde nacieron las ideas para su cine, con sus recuerdos personales y su biblioteca, para luego sumergirse en sus películas a través de modelos, decorados, bocetos, trajes, atrezzo, secuencias inolvidables y una constelación de magníficas fotografías, las de un maestro de la escenografía como Angelo Novi, que ha seguido toda la obra de Sergio Leone desde C’era una volta il West.

Siguiendo estos rastros, la exposición Érase una vez Sergio Leone se dividirá en varias secciones: Cittadino del cinema, Le fonti dell'immaginario, Laboratorio Leone, C’era una volta in America, Leningrado e oltre, dedicado al último proyecto inacabado, L’eredità Leone. El libro La rivoluzione Sergio Leone, editado por Christopher Frayling y Gian Luca Farinelli, será publicado también por las Edizioni Cineteca di Bologna.